Experiencia de María Gallego convocatoria PIR 2020

María Gallego Molinero puesto 20

Convocatoria PIR 2020

 

Nº Aciertos: 138

Nº Errores: 30

Nº en Blanco: 5

Baremo: 7,9

Posición: 20

 

Hola futuros PIRes!!!

 

Después de visualizarme tantas veces escribiendo y contando mi experiencia en la preparación PIR, aquí estoy.

En primer lugar me presento: soy María y he conseguido el puesto número 20 en la última convocatoria PIR, tras haberme presentado en 3 ocasiones.

 

Primera convocatoria (2018):

 

Empecé despacio, necesitaba descansar de la carrera, yo estudié en la UNED y tras 4 años muy intensos necesitaba respirar un poco así que muy poco a poco decidí apuntarme al curso presencial de los sábados de CeDe.

Los primeros meses con las clases muy intensas, puesto que en este curso en un día se daba una asignatura entera (de las periféricas) y la verdad es que costaba mucho llevar el ritmo.

Ya cuando llegó septiembre me vi que o apretaba o iba a llegar con la mitad del material sin ver, así que me puse mucho más en serio y bueno, los últimos meses lo pasé realmente mal, somaticé mucho (incluso llegué a tener problemas de circulación en las piernas de lo poco que me movía).

Primer examen

Llega el día del examen, voy con una mentalidad realista, me fijo de objetivo quedar entre los 2000 primeros, sabía que había gente con mucho nivel, pero también confiaba en lo que había estudiado… me dan el examen, lo empiezo a leer… me digo:

 “¿¿De verdad he estudiado los manuales correctos??”

“Creo que se han equivocado de examen…”

Me empieza a doler muchísimo la cabeza y así aguanto casi las 5 horas que eran de examen, con una migraña fuertísima y sin saber cómo no vomité allí…

Salgo llorando, malísima, fatal, sin saber cómo me tengo en pie. Llego a casa y lo único que me apetece es dormir y que nadie me moleste.

Después de ese día tan horroroso (no sé cómo no tengo trauma), vuelvo a ser feliz. Salen las listas definitivas y acabo la 1100 y algo.

Objetivo cumplido. No mal pero tampoco para tirar cohetes, pero bueno lo que me esperaba.

 

Segunda convocatoria (2019):

 

Me apunto a CeDe a distancia (sin clases) por economizar, y ya que sabía que tenía mucho que machacar de sus manuales no veía necesario repetir otra vez con las clases.

Objetivo a realizar

Sé cuál ha sido mi punto débil en el primer año: no hacer apenas simulacros—> ERROR MÁXIMO.

Así que este año hago todos los de CeDe y me propongo hacer muchas preguntas (a partir de septiembre, todos los días unas 50-100) y esto último hace que suba muchísimo mi puntuación en simus.

A partir de septiembre me lo empiezo a creer, veo una mejoría increíble y me veo realmente con posibilidades (aunque esta creencia va por días, obvio).

Descanso

Último mes antes del examen, a dos semanas del “día D” me da una migraña tan fuerte que no paro de vomitar: S.O.S. mi cuerpo me pide un parón OBLIGATORIO.

¡A solo 2 semanas! Nervios. Ansiedad. Pero paro, porque no me queda otra. Reflexiono sobre esto, sé que me he forzado demasiado así que soy más realista con el tema de horas dedicadas al PIR, tengo que darlo todo en los últimos días: SÍ, pero no quiero llegar sin fuerzas al día del examen.

Llega el examen

Llega el día, de nuevo me dan el examen, voy leyendo y sé que también es difícil, aunque sé que me puedo defender mucho mejor que el año anterior.

Otra vez la migraña me visita, intento luchar al máximo, razonar cada pregunta, tengo la sensación de que arriesgo demasiado y finalmente me dejo 14 preguntas en blanco, lo sé, pero decido entregar mi examen aunque aún me queden 40 minutos más, mi cabeza va a explotar, no puedo defenderlo más… salgo con mejores sensaciones que el año anterior sí, pero no suficientes.

Finalmente, en las definitivas puesto 253. Contenta, mucho, pero me quedo a pocas preguntas de entrar lo que me hace preguntarme:

¿Qué hubiera pasado si hubiera contestado esas 14 preguntas…?

 

Tercera convocatoria (2020):

 

A pesar de esto, empiezo con muchísima motivación este año, creyendo que es posible, que ya me separa muy poco de mi ansiada plaza. Decido apuntarme a una academia que vaya por manuales de referencia porque siento mucha indefensión con las preguntas fuera de temario en las asignaturas centrales, aunque en las periféricas sigo con los esquemas y manuales de CeDe ya que considero que están súper completos.

Con la ampliación voy muuuuy lenta a pesar de que ya tengo una base.

Más adelante me apunto al Curso de Tratamientos de CeDe que da Álvaro (MARAVILLA PURA) y CEDE EXAM para hacer preguntas todos los días.

La motivación por el puesto en la última convocatoria se va pronto, tengo sentimientos encontrados con tanta ampliación: muchísima sensación de incontrolabilidad del temario, siento que cuanto más amplio, más se me olvida lo básico.

Me da ansiedad pensar que gente que lleva 5 meses tiene más claro que yo cosas esenciales… he luchado con este sentimiento prácticamente la mitad de este último año, ha sido de lo más difícil de llevar.

Cuando amplías hay una fina línea entre el equilibrio y volverte loco ampliando cosas innecesarias.

Ultimo examen

En fin, llega el “día D”, me da pánico el tema de la mascarilla, como me va a afectar en el examen… pero llego, espero 1 hora mientras hago autoverbalizaciones positivas y tranquilizadoras, me dan mi examen y lo defiendo a muerte, hasta el último minuto. ¡¡¡Consigo controlar la migraña!!! POR FIN, hago un examen de convocatoria sin ese dolor insufrible.

Tengo que decir que las preguntas de evaluación me mataron, las iba contestando pensando “esto ni me suena… pero seguro que al de al lado tampoco”.

Ni que decir tiene que fallé muchas de esas, pero también acerté alguna por pura deducción de lo que yo sabía. De ahí la importancia de estar tranquilo e intentar buscar en tus conocimientos, en lo que ya sabes, cosas que te ayuden a descartar opciones.

Finalmente me dejo 6 en blanco, las máximas que me permitió mi salud mental después de la convocatoria anterior (me cuesta mucho arriesgar, para mí en este examen dejarme solo 6 fue un logro).

Salgo del examen CONTENTA, mucho. Aunque esto lo achaco más a que no tuve la migraña ya que era consciente de lo complicado que había sido el examen y de lo mucho que se habían clavado.

Los siguientes días soñaba con las preguntas, con los fallos tontos que iba descubriendo que tenía… dormía fatal fatal… pero finalmente mereció la pena.

 

Conclusión

 

Conclusiones y aspectos que considero claves durante la preparación:

  • Hacer MUCHÍSIMAS preguntas, muchos simulacros y de diferentes academias creo que es de lo más importante, incluso más importante que estudiar en muchas ocasiones. Hacerte a cómo preguntan de diferentes maneras y conseguir una estrategia a la hora de hacer el examen es muy muy importante.
  • DESCANSO. Supermega importante. Si tú no paras, tu cuerpo lo hará de manera obligatoria y créeme, no quieres que eso pase porque no está en tu planning. Para quien no tenga otra cosa a parte del PIR o lleve varias convocatorias en serio y se pueda permitir echar menos horas en futuras convocatorias: HACED EJERCICIO (andar, gym, nadar…lo que sea, muévete!), se echa muchísimo estrés. Yo lo noté muchísimo e incluso este año no dejé de ir ni en los últimos meses. Para mí fue CLAVE.
  • Libreta de errores, y estudiarla TODAS las semanas. Cuando ya sea un buen tocho ir por secciones, pero no dejarla nunca. Yo a parte de los errores también apuntaba cosas que consideraba muy preguntables y que se me olvidaban siempre (así, a fuerza de cabezonería, me aprendí muchos criterios)
  • Rodéate de gente que te sume. Tanto opopires como personas que no tengan nada que ver con esto. Super importante que no dejemos de socializar, aunque obviamente no podemos decir que sí a todos los planes, tampoco podemos quedarnos solos en este camino, seguro que cerca de ti tienes a gente que te comprende y puedes hacer piña con gente de tu academia para hacer esto más llevadero. El apoyo social y emocional al final es lo que te puede ayudar en momentos de crisis (que es normal que tengamos bastante a menudo).

Y si has llegado hasta aquí, ÁNIMO. Si ya has decidido empezar este camino (o seguir tras varias convocatorias) es que eres MUY VALIENTE, independientemente del resultado.

No todo el mundo se atreve a luchar por sus sueños.

 

 

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